“Los bufones de Velázquez” ante la deshumanización de las personas con acondroplasia y otras Displasias Esqueléticas
Los bufones de la corte fueron pintados por Velázquez hace 400 años. A través de una recreación elegante de estos cuadros y un discurso provocador, tomado del testimonio de los propios personajes que hablan de su realidad, una campaña pone de manifiesto cómo la sociedad actual, ridiculiza a las personas con acondroplasia y otras displasias esqueléticas.
“reivindicamos nuestros derechos, no pedimos favores.
Exigimos respeto, dignidad, acceso a una atención médica adecuada, a una educación inclusiva, y a la plena integración en la sociedad.
Esta campaña es un recordatorio de la necesidad de un cambio profundo en la forma en que somos percibidos y tratados”
“Esta es una campaña dura, incómoda, pero necesaria.
Queríamos algo que fuera difícil de ignorar.
la deshumanización y la ridiculización de las personas con acondroplasia es una realidad que no podemos seguir pasando por alto”
Velázquez recogió en sus notas las características de sus retratados:
- el inteligente enano Don Sebastian de Morra, sentado sobre el suelo
- el bufón calabacillas, de mirada bizca y sonrisa estúpida
- Francisco Lez-cano «El niño de Vallecas», pura inocencia
- D. Diego de Acedo, rodeado siempre de libros
- Don Antonio el Inglés, junto a esa enorme perra mastín casi de su tamaño
- el fanfarrón Don Cristóbal de Castañeda y Pernía, más conocido como Barbarroja
Estos bufones, enanos o personas con discapacidad intelectual, cuya función principal era divertir al rey Felipe IV, eran funcionarios de la corona, y recibían un sueldo más que digno en comparación con el vulgo. Y al parecer eran muy queridos por la familia real y el propio Velázquez, que los retrata a todos con una dignidad similar a la que usó con filósofos, dioses de la mitología, figuras históricas, la familia real o el pueblo llano.
“Se adelanta aquí el maestro al romanticismo, y además brinda a reyes y demás fauna palaciega un espejo, pues visten igual los nobles e infantas que los bufones y meninas.
De hecho, en su obra maestra, «Las Meninas» mezcla a todos por igual”
Los bufones de Velázquez. Retratos de sus colegas residentes en palacio. Diego Velázquez
En España, 4 500 personas viven con Acondroplasia y otras Displasias Esqueléticas con talla baja severa
De éstas, entre 1 200 y 1 500 tienen específicamente acondroplasia. El 60 % están en paro. Solo una minoría accede a estudios superiores. Además, la falta de accesibilidad en el ocio y las actividades recreativas aumenta su sensación de aislamiento y soledad.
Disney discrimina a los actores enanos en su versión en imagen real de Blancanieves y los humilla sustituyéndolos por imágenes generadas por ordenador (CGI Computer-Generated Imagery)
La cosa es que, al famoso actor con acondroplasia, Peter Dinklage (Tyrion Lannister en Juego de Tronos), le pareció un menosprecio que los siete enanos del cuento vivieran juntos en una cueva. Por eso, Disney, borró las interpretaciones originales, sustituyéndolas por creaciones digitales. Para no etiquetar de enanos a los actores prefirió prescindir finalmente de ellos en papeles donde su presencia está enteramente justificada.
El resultado final es, además, visualmente: una inquietante baile de rostros digitales deformados que parecen una pesadilla más que un sueño.
Dylan Postl, luchador y actor con acondroplasia, denunció de que Walt Disney prescindiera de actores de carne y hueso de baja estatura y prefiriera reproducir los míticos personajes mediante animación por ordenador, corriendo su decisión original.
«Estos son papeles hechos para actores de mi estatura…
Yo no puedo optar por los papeles de Harrison Ford o George Clooney.
Hay actores enanos que sueñan con estar en una película importante como este ‘remake’ de Disney.
Y, ahora, porque Peter Dinklage diga esto nos van a privar de ello por querer ser progresista»
Las buenas personas, las que se presentan como particularmente tolerantes con algunas minorías, las que están más despiertas a nivel moral y empático, irónicamente, han resultado ser mucho más intolerantes en general con todas las ideas que no encajan con su cosmovisión.
«En vez de aplaudir la pluralidad y la diversidad, solo aceptan un tipo de pluralidad y un tipo de diversidad. Los que piensan diferente, pues, son censurados, castigados, defenestrados, despedidos, cancelados. Bertrand Russell escribió con gran tino: Infligir crueldad con buena conciencia es un deleite para los moralistas, por eso inventaron el infierno»
La «cultura woke»
Harvard ha sido calificada como la peor universidad de Estados Unidos en lo tocante a la libertad de expresión, con una puntuación de cero sobre 100. Lo cual no deja de ser irónico si releemos el discurso inaugural del presidente de Harvard, Charles W. Eliot, en 1869: La noción de que la educación consiste en la inculcación autoritaria de lo que el maestro considera verdadero puede ser lógica y apropiada en un convento o en un seminario para sacerdotes, pero es intolerable en las universidades y en las escuelas públicas.