Los niños de familias con una red social escasa tienen mayor riesgo de padecer problemas psicosociales. Se confirma la relación entre los factores de riesgo sociales y trastornos como la ansiedad o la depresión
Los factores de riesgo sociales en niños tienen consecuencias en su salud física y psicológica afirman Luis Moreno, Isabel Iguacel Azorín y el resto de investigadores del grupo GENUD de la Universidad de Zaragoza y cuyos resultados se recogen en la revista científica “European Child and Adolescent Psychiatry”.
Los niños cuyos padres afirmaban contar con una red social de apoyo escasa, es decir, con una o ninguna persona de apoyo en caso de necesidad, presentaban el doble de probabilidades de tener problemas psicosociales (un bajo nivel de bienestar mental y problemas internalizados, como depresión o ansiedad,entre otros) en comparación con aquellos niños cuyos padres tenían dos o más personas con las que poder contar en caso de urgencia.
La base de la investigación es el estudio multicéntrico IDEFICS (Identification and prevention of dietary- and lifestyle-induced health effects in children and infants study) realizado a 6.000 niños en Bélgica, Chipre, Estonia, Alemania, Hungría, Italia, España y Suecia, en los que se realizaron mediciones en los colegios a los niños de 2 a 9 años. Hubo dos momentos de medición: en el curso 2007-2008 (medida inicial) y, dos años después, en el curso 2009-2010 (medida de seguimiento).
En esta muestra, se identificaron cuatro factores de riesgo social: 1) familias que reportaron tener una red social de apoyo escasa, 2) familias inmigrantes, 3) familias con algún miembro desempleado y 4) familias no tradicionales (entendidas como aquellos niños que no vivían con ambos padres biológicos).
La educación, los ingresos o la ocupación han sido indicadores ampliamente investigados en la literatura, sin embargo, otros factores de riesgo social han sido menos estudiados.
Asimismo, niños de familias no tradicionales y de familias desempleadas tenían un 30% y un 56% más de probabilidades tener problemas psicosociales en comparación con aquellos niños que vivían con ambos padres biológicos y sus padres estaban empleados respectivamente. Estos resultados fueron independientes del género, edad, educación, ingresos y ocupación parentales; índice de masa corporal; zona geográfica y estilos de vida (dieta, ejercicio físico y comportamientos sedentarios).
Niños cuyos padres no habían nacido en el país de estudio y se consideraban como inmigrantes no tuvieron un riesgo mayor de padecer problemas psicosociales en comparación con los nativos del país.
Los resultados de este estudio ponen de manifiesto la importancia de controlar a aquellos niños con riesgos sociales desde las etapas más precoces de la vida. Se sugieren intervenciones que logren aumentar las redes sociales en aquellos padres con una red social mínima, para así disminuir el riesgo de problemas psicosociales de los niños en el futuro.
El grupo de investigación GENUD de la Universidad de Zaragoza pertenece al Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón (IIS), al Instituto Agroalimentario de Aragón (IA2) y al Centro de Investigación Biomédica en Red de la Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBEROBN).