La RSE en la Marca España
Estos días de «transiciones» y cambios en la Administración Central, vemos cómo reiteradamente y principalmente abanderado por el Ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García Margallo, se está hablando de elaborar unaIMAGEN de Marca España, fruto de políticas publicas y alianzas público privadas coordinadas. Y todos hemos visto como una treintena de empresas multinacionales españolas han sido convocadas (24/01/2012) para involucrarlas en elaborar esa marca España. Y sí pensaréis los de la RSE ya están ahí, cuál Jesulín de Ubriqueobsesionado con llevarlo todo «al toro», para decir qué podemos aportar a ello. ¿Cómo? Pues en este breve relato voy a modestamente intentar engarzarlo con unas reflexiones.
A nadie se le escapa que la internacionalización de las empresas españolas está siendo (y ha sido, aunque por diferentes razones) la «via de escape» a la actual situación económico- financiera del país, y por todos es sabido que las grandes oleadas de internacionalización española se realizaron, en los 90 principalmente, hacia América Latina, y la región sigue siendo destino «inicial» de nuevas inversiones.
A principios de noviembre de 2005, la Fundación Carolina organizó su I Conferencia Internacional sobre RSE (en colaboración con la Fundación Euroamerica) bajo la dirección de D. Ramón Jáuregui (ex Ministro de Presidencia y actual Diputado en Cortes por Vitoria) con el título «La Responsabilidad Social de las Empresas: una mirada desde España hacia América Latina». Allí por primera vez analizamos las tendencias de la RSE internacional y nacional pero, con una mirada de aplicación hacia las estrategias de RSE de las empresas españolas en América Latina. Una de las principales conclusiones que se extrajo acerca de las mismas, fue «que las empresas constituyen el mascaron de proa de nuestro país en América Latina y en casi todo el mundo. Hoy la IMAGEN DE ESPAÑA la dan las grandes multinacionales españolas que operan en 30 o 40 países del mundo, desarrollando políticas socio- laborales, medioambientales y económicas que son evaluadas por millones de personas (clientes, proveedores, medios de comunicación…)². El fomento de la RSE en estas grandes compañías propicia la percepción favorable de nuestro país en enormes espacios geográficos.Una empresa con actitudes de RSE es una empresa competitiva, innovadora, moderna y sostenible en el horizonte empresarial del futuro. Los intereses de empresa y de país convergen en las políticas de RSE (…) La RSE adquiere capital importancia como vitola de excelencia de las empresas españolas y de España en América Latina».En esos momentos de bonanza y en los que no advertíamos ningún riesgo financiero y nada nos hacía presagiar que nos veríamos en la actual situación económica, los aspectos de impacto en esa imagen exterior de España a través de las empresas españolas en América Latina, estaban más ligados a: nuestro pasado histórico común (y a superar «el imperialismo»: España siempre se lleva las riquezas) ); a la internacionalización española en sectores especialmente delicados (básicos para la comunidad y fruto en muchas ocasiones de «privatizaciones»/ intervención estatal) y a cómo laimplicación de las empresas(con el gobierno Español: APPD) a superar las graves problemáticas de desarrollo de la región.En todas ellas la RSE juega un papel fundamental para incluso la legitimidad y coherencia de la actuación empresarial: visión a l/pl y de permanencia y compromiso público por ser un actor proactivo ante las problemáticas de desarrollo y modernización de la región.
También Javier Noya en su «La Nueva Imagen de España en América Latina»(2009)³ en el anexo 12«El efecto de la RSE sobre la imagen de las inversiones españolas», analiza el BIELA («Barómetro de Imagen de las Empresas Españolas en Latinoamérica» de la consultora Villafañe y Asociados), y confirma que las acciones de RSE son uno de los puntos fuertes de las empresas españolas en la región… pero que incluso esa percepción no se corresponde con su posición como potencia inversora en la región y es por un problema de «no comunicar bien en América Latina lo que hacen allí». Por nuestra experiencia en estos años de programa de RSE en la FC, diría que incluso desde la matriz española no se percibe todo el VALOR y TRANSFORMACIÓN SOCIAL que se realiza y la potencialidad de la RSE para vertebrar ciudadanía/ sociedad civil e incidencia responsable en la gobernanza (principalmente a través del fomento del diálogo social estructural y de los procesos consensuados de dialogo con los grupos de interés y teniendo una actitud proactiva ante los impactos negativos). La RSE conecta a través de procesos de diálogo y construcción colectiva, con los desafíos globales que marcan tendencia desde los órganos multilaterales/ internacionales y la propia UE: mayor transparencia en la información, Cambio Climático, Derechos Humanos y Negocios, Sector Privado y Pobreza -> Desarrollo, Innovación Social…
Tampoco nada despreciable es el liderazgo «relativo» de las Empresas Españolas por su RSE: a muchas de ellas su propia RSE les está permitiendo protagonizar liderazgos sectoriales a través de los índices internacionales de sostenibilidad de referencia (FTSE4Good y Dow Jones SI y sus separatas sectoriales) y los «respectivos» réditos que ello entraña, en términos de valor y beneficios empresariales (cómo dice nuestra querida Catedrática Adela Cortina: «La RSE aporta a las empresas en lo material y en lo moral mucha satisfacción»). Además somos la mayor red dentro del Pacto Mundial de Naciones Unidas… tenemos un tejido institucional en España de promoción sólido, con trayectoria, protagonista y con alto nivel de participación en las discusiones sobre la cuestión a todos los niveles geográficos y temáticos.
Por todo lo anterior espero que ya no parezca «capricho de los de la RSE» la defensa de que la «RSE/C»debe de ser uno de los componentes argumentales de alto/intenso valor añadido de esa imagen exterior moderna, comprometida y responsable que proyecta España a través de sus potentes empresas y en coordinación/alianza con las políticas públicas (a su vez coordinadas como Acción Exterior en el ámbito Comercial y de Cooperación). Queda mucho por explorar y aproximar pero espero que la RSE esté en las discusiones y que en la «nueva etapa» del Consejo Estatal de RSE, que suponemos reiniciará pronto sus trabajos, también pueda aportar a ello.
1: Responsable del Programa de RSE de la Fundación Carolina. Lic. Economía. Especialista Universitario en Desarrollo Sostenible. Experto Universitario en RSE. Postgrado en Innovación social y liderazgo. Miembro de Alternativa Responsable. Premio Ramón Llull del Govern Balear.
2: Ver Presentación del coordinador al DT. 7 de la Fundación Carolina. «Responsabilidad Social de las Empresas. Una mirada desde España hacia América Latina». Coord.: D. Ramón Jáuregui.
3: «La nueva imagen de España en América Latina». Javier Noya. 2009. Real Instituto Elcano y Editorial Tecnos.