¿Quien es Irene Villa?
Una mujer alegre y feliz empeñada en que todos lo sean, para evitar así que otras personas sean víctimas del odio, la ira o el miedo tan dañinos y perjudiciales en cualquier sociedad. Amante del deporte, la naturaleza, las personas, los animales… Muy disfrutona. Término que no sé si es del todo correcto pero que me define a la perfección. Por ello huyo siempre de los enfados y las discusiones. También me gusta ahorrar tiempo de sufrimiento dándole la vuelta a la tortilla en cuestión de minutos.
¿Qué es la Fundación Irene Villa?
Es una organización que nace desde el agradecimiento y pretende ser motor para impulsar la integración de las personas con discapacidad física, intelectual y sensorial, -tampoco nos olvidamos de enfermedades raras- en la sociedad en diferentes aspectos como el deporte, la formación o el empleo. Queremos apoyar y dar visibilidad a la labor de otras fundaciones, así como asesorar a empresas y particulares sobre las ventajas de incorporar a personas con discapacidad en sus plantillas.
Vuestra máxima es: Nadie puede privarse del gran regalo que es vivir…
Porque creo que muchas veces se nos olvida lo más importante: disfrutar del regalo que es vivir, tengas o no una discapacidad. Que la única barrera verdadera es la actitud negativa y que todos tenemos algo que aportar a la sociedad. Cuando lo descubres y te implicas con pasión e integridad, es cuando realmente valoramos ese regalazo que es la vida.
¿Qué es el proyecto la Flor Dulce de Navidad?
La Flor Dulce de Navidad es el proyecto estrella de nuestra fundación. Nació en Asturias, en Ittepa, gracias a Pablo Díaz, padrino de mi hijo y parte de la fundación que dirige mi marido, para la integración de personas con discapacidad intelectual en este caso. Es un bollo riquísimo que quizá dentro de muchos años ¡hasta consiga desbancar al Roscón de reyes! porque es mucho más jugoso y con mejores fines. Está elaborado, decorado y empaquetado por personas con discapacidad intelectual. Cuesta 10 euros y gracias a la ayuda desinteresada de mucha gente, esa cantidad va íntegramente destinada a financiar proyectos de integración de estas personas que no son ordinarias, ¡sino extraordinarias!
¿Con que empresas colabora la Fundación Irene Villa?
Nos ayuda desde el principio Air Europa. En Asturias Ittepa, Distribuciones Díaz, en todo en proyecto de la Flor también Cartonajes Muñoz, Dúo harinero, y en la venta: Carrefour, Harina, Vips, Vait y Viena Capellanes.
¿Crees que es importante que las empresas adopten estrategias de RSC?
Es fundamental porque todos hemos de devolver a la sociedad parte de la que ella nos da. A todas las empresas, especialmente a las más potentes, les beneficia el compromiso social en todos los sentidos, de cara a la sociedad, a sus empleados, a sus cuentas… por un lado, están la estrategia empresarial y todos los temas económicos y por el otro, el capital humano, y necesita sentirse comprometido y responsable, para que eso alimente su fuerza, voluntad, sacrificio, autoconfianza y autodisciplina. A las empresas les interesa el rendimiento de sus empleados y creo que dan más de sí sabiéndose parte de algo más grande comprometido, generoso y solidario.