Las aplicaciones gratuitas Hablando con el arte han sido desarrolladas por Asociación Argadini, Fundación Adapta y Fundación Orange, con la colaboración de distintos museos. Basadas en el programa ‘Hablando con el arte’ están pensadas especialmente para personas con autismo o discapacidad intelectual, pero pueden ser usadas por cualquier persona.
El objetivo de las aplicaciones de Hablando con el arte, es fomentar la creatividad, a través de cinco obras maestras que podrán ser tocadas, versionadas, recortadas y todo lo que imaginemos. Estas apps están pensadas y diseñadas especialmente para personas con trastornos del espectro del autismo (TEA) o discapacidad intelectual, también resultan útiles por su atractivo a niños de diversas edades y personas mayores.
El desarrollo de las apps es una iniciativa conjunta de la Asociación Argadini, la Fundación Adapta y la Fundación Orange, contando con la colaboración de los museos que albergan las piezas.
Las cinco apps son:
-El sueño, de Franz Marc, con la colaboración del Museo Thyssen Bornemisza.
-Sarcófago de Taremetchenbastet, con la colaboración del Museo Arqueológico Nacional.
-La gallina ciega, de Francisco de Goya, con la colaboración del Museo Nacional del Prado.
-Los duques de Osuna y sus hijos, de Francisco de Goya, con la colaboración del Museo Nacional del Prado.
-La ventana abierta, de Juan Gris, con la colaboración del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
Todas ellas se pueden descargar gratuitamente para tabletas iPad o con sistema operativo Android, además de en ordenadores con sistema operativo Windows, siendo muy recomendables para su utilización en pizarras digitales.
En las distintas apps se puede, en primer lugar, explorar y conocer la obra para posteriormente intervenir en ella, por ejemplo, a través de un cuento (que se puede escuchar, leer y narrar), de una canción (que también se puede cantar y grabar) o de los cambios de luz. La intervención también se realiza a través del apartado ‘Versionar’, en el que se puede descolocar y mover a los personajes, recomponer el cuadro cambiando los colores, y también pintar y dibujar el cuadro partiendo de cero o con distintos fondos, por ejemplo, con una fotografía tomada con la propia tableta.