Según «Jóvenes, educación y medioambiente» de More Than Research para Naturaliza, 1 de cada 3 jóvenes ha tenido un maestro que le ha marcado en el respecto y cuidado del entorno
“Los maestros tenemos un gran poder de influencia porque se crea un vínculo afectivo con el alumnado que va más allá de los libros o de las circunstancias personales o sociales. Nos convertimos en su referente y, en consecuencia, debemos servir como modelo, guía y facilitadores de su aprendizaje”
Yasmín Kayali, docente de Naturaliza
¿Quién no ha tenido un profesor que marcara su etapa escolar? Que le hiciera disfrutar de una asignatura, que le hiciera pensar y ser más crítico y activo… Los maestros pueden despertar la conciencia ecológica de los alumnos.
Las aulas son, así, en lugares idóneos para divulgar en medioambiente a nivel teórico. También desde el aprendizaje activo basado en el contacto con el entorno. Se ayuda a los niños a desarrollar actitudes y valores como la sensibilidad, la empatía o el respeto por los animales. La figura del docente es esencial.
Su misión como agentes transformadores sociales consiste en transmitir conocimientos, destrezas y valores a su alumnado. Pero también en motivarles para adquirir una actitud proactiva hacia la concienciación ecológica y medioambiental. Los maestros tienen un gran poder de influencia porque se crea un vínculo afectivo con el alumnado más allá de los libros o de las circunstancias personales o sociales. Son referentes y, en consecuencia, modelos, guías y facilitadores de su aprendizaje.
«Tanto la educación ambiental como la educación en valores son ejes transversales del currículo que los maestros deben tener muy presentes. hay que educar en la «mirada sensible» de los niños y dentro de esa mirada está la «mirada ambiental».
Mis alumnos toman la iniciativa, yo solamente les acompaño en su proceso de aprendizaje. Los beneficios son múltiples, los niños son más participativos, son capaces de observar cosas que a los adultos nos pasan desapercibidas y no por eso son menos importantes. están más concentrados y, sobre todo, cambia el comportamiento.
la naturaleza les ayuda a evadirse de sus problemas”
Soraya Buey, docente Naturaliza del CEIP Miguel Íscar, Valladolid
Las salidas a la naturaleza o al campo y las visitas a las granjas escuelas son las actividades que más impactan a los jóvenes españoles en su etapa escolar. Por ello, se debe trabajar para convertir los espacios exteriores y el aire libre en aliados del proceso educativo. Algo que ya fomenta Naturaliza, poniendo a disposición de los maestros las herramientas y recursos digitales necesarios para llevar la educación ambiental a sus aulas.