El oso polar, en peligro de extinción por la desaparición del hielo en el Ártico
Ocean Born protege el hábitat natural de este mamífero y del hielo del círculo polar Ártico mediante Clean Arctic Alliance y bound4blue.
Sin hielo y nieve en el Ártico, el planeta arde, ya que reflejan y repelen el calor de las ondas solares. Los GEI producidos por el hombre contribuyen a que el 40 % el volumen del casquete polar haya desaparecido… y en 2040 será el 100 %. También aumenta el nivel del mar de 6 m y genera cambios climáticos extremos con veranos extremadamente calurosos, inviernos muy fríos y fenómenos meteorológicos catastróficos.
Solo quedan entre 22.000 y 50.000 osos polares
Si desaparece el hielo, desaparecen peces y focas y los machos han empezado a comerse a las crías. Solo la mitad de las crías llegan a la edad adulta.
Los combustibles pesados en barcos provocan carbono negro, un polvo que se deposita sobre el hielo que aumenta la absorción del calor solar y acelera el deshielo polar hasta 10 veces más rápido.
“todavía hay países que presentan una fuerte oposición a implantar políticas que prohíban combustibles altamente contaminantes»
Sian Prior, Clean Arctic Alliance
El carbono negro permanece en la atmósfera durante menos de dos semanas, así que, si se prohibiese, los beneficios se verían casi inmediatamente.
“Es una pena no poder aprovechar esta oportunidad, que tendría un gran impacto, más aún cuando existen numerosas alternativas de propulsión mecánica más limpias para los operadores marítimos”
Carolina Manhusen Schwab, Fundación Ocean Born
La tecnología de bound4blue usa la energía del viento, reduciendo la potencia del motor, las emisiones contaminantes y la dependencia de combustibles fósiles aprovechando las energías renovables en todo tipo de embarcaciones. Esta tecnología eólica de velas rígidas permite el ahorro del consumo de combustible.
Hasta 1990, el hielo del Ártico se mantuvo estable a pesar del aumento de la temperatura global. Desde entonces, cada año ha ido perdiendo masa que no se ha vuelto a formar en los meses estivales, abriendo nuevas rutas comerciales marítimas que han aumentado el tráfico de barcos en la zona hasta en un 85%. Aun siendo este uno de los métodos de transporte más rentables y de mayor eficiencia energética, el transporte marítimo por la zona del círculo polar Ártico tiene un impacto mayor en la desaparición del hielo del que se podría esperar. Todavía algunas embarcaciones utilizan combustibles pesados que emiten no solo dióxido de carbono, sino, además, carbono negro.