Las profesiones sanitarias, al servicio de la sociedad, las autoridades, organizaciones y víctimas de la gota fría
Las administraciones deben de planificar un abordaje integral en materia de Salud Pública a corto y medio plazo
La respuesta a la emergencia debe de contemplar un enfoque integral y hacer hincapié en la vacunación
Una estructura permanente para canalizar su participación y asesoramiento a la Administración permitiría la toma de decisiones ágiles en materia de salud pública y en contextos de emergencia como el actual.
Todos los Consejos Generales Sanitarios en representación de un millón de profesionales, expresan su más profunda solidaridad con víctimas, familiares y afectados por la reciente Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) que ha azotado a nuestro país.
Solidaridad con aquellos que han sufrido los embates de esta emergencia
Los profesionales de la salud reafirman su compromiso de servicio a los demás, especialmente en momentos críticos como este. Las profesiones sanitarias colegiadas manifiestan su disposición total para colaborar en todas las tareas de emergencia, atención y recuperación, así como en el apoyo psicosocial que sea necesario tanto ahora como en las distintas fases de recuperación.
De igual manera, muestran su reconocimiento y respaldo a las instituciones, fuerzas de seguridad, protección civil, organizaciones en terreno y voluntarios cuyo trabajo incansable está siendo fundamental para la atención y protección de la ciudadanía en las zonas afectadas.
Los sanitarios se ponen a su disposición para cooperar en las medidas de asistencia y recuperación, así como en cualquier iniciativa conjunta que sirva para aliviar el sufrimiento de las personas damnificadas.
Conscientes de que la reconstrucción y recuperación exigirán un esfuerzo coordinado y sostenido en el tiempo, las profesiones sanitarias colegiadas reiteran su compromiso de trabajar juntos con todos los sectores de la sociedad en la tarea de devolver la normalidad y la seguridad a nuestras comunidades.
Para ello, inciden en la necesidad de responder a esta emergencia sanitaria a través de un enfoque integral, empleando un abordaje que contemple un planteamiento global de colaboración, que se hace más necesario que nunca para la obtención de mejores resultados en salud.
Una estructura permanente para canalizar la participación de las profesiones sanitarias y su asesoramiento a la Administración
Ello permitiría la toma de decisiones ágiles en materia de salud pública y en contextos de emergencia.
Cabe recalcar el papel central de las políticas de Salud Pública, por parte de todas las administraciones en cualquier respuesta a corto, medio y largo plazo para evitar riesgos, prevenir problemas secundarios y reconstruir un ecosistema de salud fuerte y sostenible. Medidas como la vacunación son vitales para la protección de la salud comunitaria.
Los sanitarios son fuentes de información solventes para combatir los bulos y desinformación intencionada que suponen un enorme daño a las víctimas y los dispositivos de emergencia.
Para todo ello, es imprescindible el trabajo interdisciplinar, en equipo y en continua colaboración de todos los actores implicados. Solo juntos, como sociedad, saldremos adelante de esta difícil situación, y las profesiones sanitarias estaremos, como siempre, a disposición de la ciudadanía, ofreciendo nuestro apoyo profesional y humano en todo lo que se requiera.
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Aguas de inundaciones después de un desastre o una emergencia
Foto de Mikhail Nilov