¿Aislamiento social, ansiedad, depresión, pérdida del sentido de la identidad y reducción de la confianza y la autoestima?
El “síndrome del teléfono apagado” afecta a profesionales séniores desempleados debido a su difícil contexto en el mercado laboral.
Ante esa sensación de invisibilidad laboral hay que ponerse metas profesionales realistas, cuidar el bienestar emocional, buscar apoyo social y rutinas que ayuden a mantener la motivación.
Generación SAVIA impulsa la empleabilidad de los profesionales sénior, ayudándoles a explorar nuevas salidas profesionales y a superar, entre otros, el síndrome del teléfono apagado.
Los profesionales mayores de 50 años representan el 30 % del paro total en España
Además, el 40 % de los desempleados senior son de larga duración, es decir llevan más de 12 meses en una búsqueda infructuosa de empleo.
«Sufrí este síndrome y su impacto en la salud mental. Es importante desarrollar estrategias para afrontarlo de manera saludable y mantener una mentalidad positiva para sobrellevar esta etapa de la búsqueda de empleo de manera efectiva”
Julio Estalella superó el Síndrome del Teléfono Apagado
Este ingeniero sevillano, tras 27 años de trayectoria profesional, vio concluir su carrera en el sector de la energía y la infraestructura. “
Ya nadie me cogía el teléfono, fue un momento de grandes desilusiones porque me di cuenta de que la gente ya no estaba ahí”
Estalella buscó soluciones imaginativas y las encontró en un vídeo sobre cómo crear salsa de tabasco.
“A partir de ahí mi vida profesional cambió, encontré la forma de hacerle frente al síndrome del teléfono apagado”
Fundó Salsas Quietud, un negocio de salsas picantes que se ha internacionalizado y con el que ha logrado vender en dos años 10.000 botes. Fue segundo premio de la IV Edición de los Premios +50 Emprende, una iniciativa de Generación SAVIA y la productora 02:59 Films.
